Planeta Palomitas
La vida es un regalo y una vida es un regalo.
Y la amistad y el arte de vivir bien son el papel de envolver y la cinta de celo.
Este mes el universo no me permitió dudar de este principio y añadió abundancia y alegría.
El 11 de junio, un día como cualquier otro martes de los últimos 9 meses, el alumnado de la Profesora Mage Arnal, nos reunimos a la hora de la clase para ensayar y jugar. Pero aquel día a las 20.15 entró el público. Ya llegó la muestra del fin del Curso Regular Payasa/o: Dispara tu comicidad.
He llegado a un punto de aprendizaje con malabares que me siento la seguridad de decir, ¿Malabares? Sí, sé hacerlos.
Solo es un poco, pero mucho más que hace cuatro meses.
¡Qué sangre, sudor y risas he vivido para aprender!
Aniversario del día cuando me enteré de como se llamana mi energia payasa. 23.02.2020. Estaba estudiando en el Espai de Circ – AVC con Sandra Lerma y la Escuela de Clown Hijas e Hijos de Augusto. Una alegría y un alivio. Es mucho más fácil hablar y conectar con alguien cuando se sabe su nombre.
¡Pop, pop, querida gente! Nos vemos p’aquí y p’allá.
El baile feliz del aniverasario, canal Planeta Palomitas.
Adiós 2023. Hola 2024.
Se dice que un final también es un comienzo.
También me gustan las cosas complicadas y digo que un final y un comienzo también son continuaciones. ¡Ja! La vida según Palomitas.
Empecemos por ahí en principios y continuaciones, cosas nuevas que durarán.
¡Nueva nariz!
Hoy celebro tres años desde que conocí el nombre de mi payasa, ¡Qué viva Poppy, Pop Corn, Palomitas de Maíz, ey tú y más! ¡Lo importante es que me llamen!
¡¡ Rebeldía, alegría y brocoli, querida gente !!
¡Y tachán!
¡Soy yo, Palomitas de Maíz, en parte profesora, en parte trabajadora comunitaria y payasa total!
Mi persona de toda la vida, Didi, me escribió un poema en celebración de mi nombre porque hace dos años hoy que ella se enterró de cómo se llama esta energía que lleva dentro.
¡Y tachán! Soy Palomitas de Maíz, también conocida como Palomitas, Pop Corn, Poppy, guapa, cariño y mucho más.
Me dijo que me escribiera porque soy su amiga infatigable, constante y de buena actitud. La hago feliz.
Mi poema de Didi.
Ser payasa me da vida
Hace dos años cuando hice mi primer curso de clown en la Escuela de los hijos y las hijas de Augusto, me flipé. La experiencia me abrió el corazón de una manera que siete años de meditación no había logrado. O podría ser que las dos practicas – meditación y clown – se combinaron y por eso me impactó tanto.
Sol y sombra
En septiembre hice un tercer taller de conexión entre el clown y la naturaleza en Cabanyal Horta.